El gran día llegó y la Catedral estaba abarrotada. Clavariesas con teja y mantilla y clavarios ataviados con chaqué presenciaron desde los primeros bancos la misa de pontifical honor a san Vicente Ferrer, presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, D. Agustín García-Gasco. La celebración oficiada en valenciano, comenzó con la quema de incienso ofrecida a la figura del santo patrón.
El Evangelio elegido para la ocasión fue un versículo de San Marcos sobre la aparición de Jesús a los apóstoles para anunciarles la predicación que debían llevar a cabo por toda la tierra y en todas las lenguas A su fin, el fraile dominico Doménech García Vila, de la Parroquia de los Ángeles del Cabanyal, fue el encargado del sermón que se celebró para continuar con una antigua tradición que evoca a las predicaciones que desde el púlpito de la propia Seo, que todavía se conserva, hizo el santo valenciano perteneciente a la misma orden religiosa.
A las 19.00 horas comenzaba en la puerta de Los Hierros de la Catedral de Valencia la procesión en honor de San Vicente Ferrer, acto que estaría presidido por el cardenal arzobispo, D. Agustín García-Gasco, y que contó con la participación de los altares vicentinos, los clavarios y falleras. Els xiquets de Sant Vicent acudieron a la cita con la vestimenta que lucieron en las representaciones dels Milacres del santo Patrón.
Heraldos del Evangelio 
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